Corría el año 2015 cuando las tabletas de Nestlé Jungly dejaron de comercializarse.
Este chocolate marcó un antes y un después en el mercado, ya que optaron por un diseño muy llamativo que te transportaba a la jungla, unos personajes que eran los protagonistas de las onzas de chocolate, y una tarjeta coleccionable dentro de cada envoltorio. Su decisión de dejar de venderlas, residía en que no llegaban a todo el público que esperaban y sin apenas hacer ruido, este chocolate desapareció de los lineales del supermercado.
Lo que jamás se hubiesen esperado es que 3 años después uno de los streamers más conocidos a nivel mundial, revolucionaría el mercado.
Ibai Llanos, lanzó una propuesta a Nestlé pidiendo el regreso de este icónico chocolate y con más de 4,5 millones de seguidores en Twitter ¿cabía alguna duda que no iban a escucharle? En apenas unos meses desde su primer mensaje, se registraron más de 10.000 mensajes de diversos perfiles pidiendo la vuelta de las tabletas, se inició una campaña en Change.org y copó las rrss de memes.
Ante esta avalancha, Nestlé decidió jugar bien sus cartas y contactar con el streamer para ofrecerle un lote de productos. No contento con ello reclamó más para poder repartirlo entre sus seguidores.
Resultado? El 18 de enero de 2021, se confirma la vuelta del chocolate, se crea una subasta para adquirir la primera tableta, y se genera un tráfico de conversaciones en twitter que revienta audiencias. Ibai, hace la puja más alta adquiriendo el primer Nestlé Jungly por 6.750€ y la fiebre por conseguir una en los supermercados, deja vacíos los estantes durante las primeras semanas de venta.
Este caso, nos enseña que la escucha social activa en Redes Sociales y en nuestra sociedad es indispensable para conocer qué está sucediendo, y qué podemos hacer como marca para llegar a nuestro público objetivo. Para Nestlé, este debate que empezó como una broma supuso un trampolín para ser el centro de atención de muchas conversaciones, posicionándola como la marca que trae de nuevo las cosas que en algún momento nos hicieron felices. Además, Nestlé se involucró hasta el final en este “juego”, con lo que también vemos cuán importante es tener capacidad para responder ante lo que pide tu público.
Si un streamer con más de 6,5 millones de seguidores en Twitch, y una empresa como Nestlé han logrado esta campaña de marketing “involuntaria”… ¿qué no podemos esperar del futuro de la publicidad?
