“¿Qué más da tener una buena página o una mala? ¡Con tenerla bastará!” Cada vez que oímos una frase así sabemos una cosa muy cierta: estamos ante un inminente fracaso empresarial. Y es que en 2019 es imposible tener un buen negocio que se precie que no tenga un buen diseño web es inviable.
Para que lo entendamos, tenemos que pensar en la página web de un negocio como el escaparate. ¿Tendríamos un escaparate lleno de polvo y telarañas? ¿Lo tendríamos vacío? ¿Mal iluminado? Claro que no. Si una tienda tiene un escaparate lo cuida, lo mima, limpia los cristales… El diseño web es exactamente eso: proteger, cuidar y mimar del escaparate digital que tenemos. A fin de cuentas, una página web es la forma que tiene una empresa de darse a conocer a sí misma y a sus productos y servicios al resto del mundo.
Pero lo cierto es que hay muchas más razones por las que deberíamos tener un buen diseño web en nuestra página web. Y una de ellas es el tiempo de carga. ¿Te imaginas que alguien está en tu página y tarda en cargarse? ¿Qué crees que puede pasar? ¡Pues que seguramente se vaya! Así, tener una página rápida y reactiva, bien diseñada, es un aspecto muy importante para que todo funcione como debe ser.
El diseño web: fundamental en el eCommerce
Sin embargo, si hay un lugar en donde el diseño web es especialmente importante, ése es el eCommerce. Cuando ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de comprar nuestros productos online, los hacemos pasar por todo un recorrido que empieza añadiendo el producto al “carro de la compra” y acaba pagando. Si hay algún error durante todo este proceso o no es claro… ¿Qué pasará? Exacto, que el cliente abandonará la compra e irá a comprar el producto en otra parte.
Además, otro factor donde es importante contar con un buen diseño web es en el SEO. El SEO, o posicionamiento en buscadores como Google, bebe en gran medida de los contenidos que hacemos para el blog. Sin embargo, el diseño web y la reactividad de la página web juegan un papel muy importante en que nuestra empresa salga de las primeras a la hora de buscar en Google. ¿No está adaptado a los móviles tu diseño? ¿No es rápido cargando? Entonces es más que probable que Google te lo penalice.
Por último, un buen diseño web tiene un componente estético muy importante. La estética forma parte de cualquier estrategia de marketing. ¿Acaso no triunfan las cosas que suelen ser llamativas y hermosas? Si hacemos que la página lo sea, que transmita los valores de la empresa y que ponga el acento en aquellas cosas en las que somos buenos, conseguiremos que el diseño web sea un aliado. Así, una empresa joven y dinámica tendrá que apostar por diseños web que resalten esto. Por el contrario un banco o una empresa seria y responsable, deberá tener en cuenta este valor también a la hora de diseñar su página web.